Esta noche, en mis sueños, todos gritan.

No creo que se llame imaginación, simplemente me gusta mirar hacia un costado y ver más de lo que observo.
Se acabaron todos esos meses en los que daba por sentado que me consideraba un ser maravilloso. Por fin me ve como soy en realidad:violenta, desconfiada, manipuladora y letal.
Y lo odio por ello
May the odds be ever in your favor

11 de febrero de 2013
Hablando de vos...una vez más.
Me siento a escribir y no sé por dónde empezar. Mi cabeza se llena de ideas y pensamientos que principalmente hablan de vos. Pero yo no quiero hablar de vos. Porque odio que habites mi cabeza de esa manera, porque odio que todo el tiempo mi concentración esté fija en tu persona y no pueda dejar de pensarte, porque sé que no pensas en mi, porque sé que un día te importé... no lo valoré y ahora ya no puedo remediar mis errores. Porque me agota que me aturdas con tu nombre cuando intento dormir, caminar, estudiar, correr, hablar. Porque sos tan único. Porque solo puedo decir cosas buenas de vos a pesar de todo,cuando sé muy bien que de mi solo podes hablar mal. Porque saltas así de la nada, porque me odio cuando imploro a Dios, al diablo, al destino, a quién sea que te traiga acá, que me de otra oportunidad, para demostrarte que lo ultimo fue solo un lapsos de mi propia rebeldía (si así se lo puede denominar), para demostrarte que volví a ser la que conociste. Porque te juro que estoy harta. Y lo digo entre risas para no llorar. Porque estoy cansada de tus juegos mentales y tus fantasías que no me incluyen. Porque me sofoca el saber de vos aunque no tengamos ninguna conexión cuando vos no te preocupas por saber de mi. Porque odio tu tan escaso orgullo que concentras en mi. Porque ya no sé que hacer, para que entiendas que no te puedo odiar.. Con esa sonrisa, esos ojos, y con tu carácter y personalidad tan diferente a las demás y tus mil y una experiencias, con tus prejuicios y todo lo demás que te hace ser quién sos. Sabes muy bien, que por más que lo intente, siempre termino hablando de vos.
Suena irónico decir que la cosa más triste que he visto es tu sonrisa.
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